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viernes, junio 04, 2010

Zapping hasta el fin (Cuento)




El vehículo se detiene frente a la agencia del banco con la clásica cascada de notas músicales que hace el motor de hidrógeno al apagarse. El conductor sale del mismo usando un sombrero y anteojos oscuros.

Con ágiles pasos el conductor sube de dos en dos los escalones que conducen a la terminal del cajero automático. Al llegar a la misma coloca su Intellicard dentro del lector y teclea la clave secreta. Inmediatamente aparece frente a el una hermosa mujer de cabellos y labios plateados.

"Buenos días Señor Gómez, y bienvenido a Universo Banca e Inversiones. Soy Clara, desea hacer su transferencia diaria de fondos a su intellicard?", Dice en una seductora voz el avatar del cajero. El hombre sonríe levemente.

Justo cuando el hombre esta por dar su conformidad a la sugerencia del sistema, otro avatar aparece. Es la misma mujer, solo que esta vez es la personificación de un personaje de una novela Cyberpunk. Su cabello es verde fosforescente y uno de sus ojos es evidentemente mecánico. En lugar del sexy vestido plateado característico del uniforme de Universo, están unas gastadas piezas de cuero más acorde con una pandilla de motorizados. Con una estridente voz el nuevo avatar le dice el conductor: "Tengo tu cuenta Stup y no hay nada que hacer... gracias por el dineeero... VIVAN LOS CYBERLOCOS PIRATAS DE VERDAD!!!", vemos la cara espantada del cliente.

Todo se congela por un momento y se escucha una voz "Si usted no quiere que esto le pase a su cuenta, cámbiese a la opción de Seguridad por ADN... " Se ve un primer plano de la mano del conductor siendo escaneada por el lector. "Garantizado solo funciona en tejido vivo..." corte y vemos a un grupo de estramboticos criminales con una mano cercenada mientras son arrestados por la policía.

ZAP!

Un paneo por un cuarto. Evidentemente es el cuarto de un adolescente. Fotos de heroes deportivos y autos y naves de carrera. Vemos a un joven de 13 años tiene puestos unos visores y guantes VR. Mientras la 3dvision, que es la única fuente de luz del cuarto, tiene la imagen de una sexy Cantante de 14 años bailando sexualmente en un video... "JUUUUAAAAN!" Se oye un grito desde afuera del cuarto. "Apaga todo y acuéstate!"
Con visible molestia el joven se remueve todo el equipo mientras dice “Si mamá!”... apaga el 3dvisor y su terminal VR y se acuesta en la cama. Luego de un rato de silencio en la casa, el joven saca un aparato del tamaño de un paquete de cigarrillos conectado a algo parecido a unos audífonos. "Vamos a ver Gaby si eres tan buena como dice mi novia... " y colocándose los audífonos se prepara para ser arrastrado al placer en los brazos de su pareja virtual... Una voz se escucha "Si!!, Para jóvenes de ambos sexos, Gaby!" La figura de una joven esbelta de cabello negro desnuda llena el cuadro, "la segura y excitante solución a sus frustraciones... Certificada por el Ministerio para la Educación"

ZAP!

"Para el hombre de hoy que lo tiene todo: HERMAFRODIN HG. Por que elegir un lado de la cerca si puede ver el mundo desde ambos lados a la vez? "

ZAP!

"Y ahora volvemos con SEINFELD: La Nueva Generación!!!"

ZAP!

Vemos a un grupo de muchachos tristes, con hipoJeringas en la mano, se inyectan en el cuello y caen al piso con una sonrisa en el rostro, todo al ritmo pegajoso de una canción que dice: “Se único, se audaz, no te quedes atrás, toma RAZ!!!!!!”

ZAP!

“Entonces Doctor Schroeder, la aparición de los nuevos agujeros en la capa de ozono es peligrosa?” “Claro que si!! Vera...”, “Pero mas peligrosa es mi suegra si llego sin el nuevo Denisse!” “Por Dios escúcheme, es grave lo que tengo que decir” se oye al científico decir.

ZAP!

"Maldición!!! No hay nada en 3d..." Dice el hombre frente al cilindro del equipo. Lo apaga con un chasquido de dedos, abre una cerveza, y camina con pasos lentos y pesados hacia la ventana... "Que riñones, quien puede creer que es el fin del mundo?, claro que con tanta porquería en 3d parece eso. Al menos desde la falla de la capa de Ozono los atardeceres son impresionantes... me pregunto si hoy nos toca agua dulce... "

sábado, diciembre 05, 2009

Es el día de navidad.(Cuento)


Oscuridad. Suena el despertador. Es el día de navidad.

La navidad siempre ha sido tu época del año favorita. Los olores y sabores de la comida y la bebida, los sonidos de los villancicos y el afecto de amigos y familia.

Y de la navidad no hay nada mejor para ti que el acto de abrir los regalos el día de navidad. Ver la cara de alegría y maravilla de tu hijo al desenvolver sus regalos y ver que son exactamente los que le pidió al Padre Navidad. Ver la picara mirada de tu esposa cuando comparte contigo el "misterio" de esos regalos.

Pero esta navidad hay algo raro en el ambiente. No terminas de precisar exactamente que es. Como si no pertenecieras a ese lugar, a ese momento. Repentinamente tu esposa se ve a la vez conocida y extraña. Tu hijo, aunque cariñoso, parece simplemente un niño mas para ti. Tu casa, es ajena y al mismo tiempo conocida. Mas que haber vivido en ella sientes que has leído sobre ella. Caminas a la cocina, y cuando abres la nevera esta concuerda exactamente con la imagen mental que tenias de ella. Lo mismo pasa con la gaveta de los cubiertos y la de los utensilios.

La sensación se hace mas y mas intensa a medida que se acerca el momento de abrir los presentes. Y justo cuando tu hijo abre el primer regalo y te abraza un punzante dolor atraviesa tu cráneo. El mundo se desdibuja y te desmayas.

Oscuridad. Escuchas un sonido mecánico, ululante y de baja frecuencia. Un aire acondicionado? un motor? no puedes estar seguro. Estas acostado. Lo primero que piensas es que estas en un hospital. De hecho sientes cables conectados a tu cuerpo. Abres los ojos y ves un techo blanco. Estas casi seguro que es un hospital. Te ves, y estas desnudo, acostado y con lo que parece ser un juego completo de monitores cardiacos conectados a tu pecho. Piensas con cierto alivio que te dio un infarto. Para ti era mas seguro ese conocimiento que la desconcertante sensación que sentiste... horas? días? antes.

"RUPTURA DE PERSONALIDAD. RETORNO ILEGAL UNIDAD 3475. CORRECCION INMEDIATA DE OPERADOR PERSONAL REQUERIDA" oyes en lo que parece ser un sistema de alto parlantes. Volteas a tu derecha y la imagen te llena de horror. Cientos, miles? de copias tuyas yacen acostadas en camas similares a la tuya en una estancia gigantesca. Hacia tu izquierda es la misma imagen. Todos dormidos Todos conectados a la pared por una red de cables.

"Buenos días señor P." dice una voz aburrida frente a ti "Como amaneció hoy?" cuando volteas ves a un hombre enfundado en un traje blanco. Su rostro oculto por el mismo te ve a través de lo que parecen lentes protectores. Toma un panel o algo así del frente de tu cama, "Veamos... " comienza a decir con el tono de quien revisa un auto descompuesto mientras teclea en el panel y lee lo que este le responde"UMHUM!... un desbalance en la interfase sináptica 245. Estas porquerías genéricas. Siempre pido Tesslër-Ikarani... Pero me lo dan? no! Y me toca a mi lidiar con los despiertos... luego las quejas, que si perdí datos, que si mi simulación se cayó..." dice el hombre mientras continua tecleando algo en el dispositivo que sostiene en su mano. Luego levanta la mirada y te ve. "Y su mirada perpleja... señor P. Su mirada perpleja... es lo que mas me molesta." dice con un tono un poco triste. "Bueno... A dormir!" y con un gesto juguetón de la mano presiona algo en el panel.

Oscuridad. Suena el despertador. Es el día de navidad.

viernes, noviembre 20, 2009

Un dia de Playa (Cuento)

De entre los papeles que están sobre su escritorio y que vienen del sobre ve una postal de una isla en el mar
El juego había durado meses. Cuantos? No era interés del Inductor de la Verdad saberlo. Su trabajo era hacer que el Librepensador viera su error. Que se diera cuenta de que el tener pensamientos en contra del proceso era erróneo, pecaminoso, intolerado.

Con impecable traje oscuro y corte de cabello de acuerdo a los reglamentos, el Inductor esperaba por su “paciente” sentado de su lado de la mesa ubicada en el medio de un cuarto perfectamente blanco. Era todo parte de la rutina.

En la mesa la jarra de agua, vasos, archivos y parte del instrumental utilizado para hacer que el paciente viera la verdad. Al frente de esta mesa estaba la silla de interrogatorios. Una suerte de silla de dentista con amarras diseñada para ser realmente incomoda para su habitante.

La puerta se abre y entra un hombre flaco, golpeado. Mas que un hombre, el fantasma de uno. La boca con dientes negros. El rostro y el cuerpo desnudo surcado por diversas cicatrices en distintos estados de “frescura” e infección. Y curiosamente, sus ojos con una mirada brillante y curiosa.

Sin mediar palabras entre ellos, ambos tomaron posiciones para la obra que se llevaría a cabo ese día, como todos los días durante los últimos 3 meses.

El dolor inflingido por el Inductor de la Verdad para hacer que el Librepensador cambiara su forma de pensar. Y la terquedad de este en no hacerlo. Los gritos de dolor y espanto del librepensador, y la suave y conciliadora voz del Inductor. Todo parte de la rutina.

Y siempre la misma respuesta: “Es que no lo ves porque te dejaste enceguecer, no importa lo que hagas soy libre, no importa donde me encierres soy libre, no importa lo que yo diga soy libre. Ambos lo sabemos, por que continuas con esto? Aun si te diera la razón y dijera al mundo que Yo, el Librepensador, creo que el proceso es lo mejor, tu sabrías tan bien como yo que en mi mente yo sigo en contra. Por que es en mis ideas que se encuentra mi verdadera libertad. Si algún día lo perdiera, seria porque estoy muerto. Y aun así... ”

Y el Inductor le mostraba números, le mostraba testimonios, le mostraba el dolor y el terror. Y aun así la respuesta seguía inalterable “Tu sabes tan bien como yo que no es así”

Y lo sacaban a rastras del cuarto blanco. Algunas veces a que lo “repararan”, otras a su celda, y otras mas simplemente lo dejaban tirado en el patio.

Pero hoy había algo diferente. Luego de sentarse en la silla el Librepensador vio una expresión en el rostro del Inductor parecida a la de la comprensión de un misterio largo tiempo encontrado.

“Ahora se, mi estimado compañero, por que se aferra tanto a su posición. Orgullo... Orgullo, y la necesidad de todo padre de demostrarle a su hijo que es un hombre integro, valiente, que no le teme a sus enemigos. Pero como siempre le he dicho, compañero, todo puede cambiar. Es el estado natural de las cosas el cambio”

Con una leve sonrisa en el rostro, el Inductor toma un sobre grande de la mesa y lo vacía. De entre los diversos papeles toma un par de fotos grandes y se acerca al Librepensador.

“Esto mi amigo es la prueba irrefutable que todo cambia” Le dice mientras muestra unas fotos de su hijo con el uniforme de los Jóvenes Liberadores de la Patria. “Su hijo, su propia simiente, la razón para mantener tu actitud, es un adepto al gobierno y al proceso”

Durante unos segundos el librepensador ve la foto. Luego, con una leve sonrisa levanta su rostro y viendo al Inductor al rostro le dice “Mi hijo es libre. Y mas allá de lo que me muestras lo único que has hecho es probarlo. El siempre tuvo la libertad de ser parte del gobierno. Al contrario de ti.”

El Inductor se levanta de la banqueta y se acerca a la silla donde esta amarrado el Librepensador. “Uhm... Bueno, tal vez te interese saber que tu esposa y tu hijo murieron al poco tiempo de tomada esta foto.”

Por un momento una tristeza profunda asoma al rostro del Librepensador, tristeza solo comparable a la alegria del Inductor "Por fin rompi su armadura de falsa creencia!. Ahora si aceptará la verdad del sistema!" penso durante ese momento el Inductor.

"Gracias... " dijo el Librepensador su rostro ganando una paz increible, casi hermosa. "Has mostrado algo que te he dicho una y otra vez. ¿Por que matarlos si no piensan como tu? ¿Por el crimen de ser libres o por la demostración a los demas de que pueden tomar esa libertad?". Con una leve sonrisa el Librepensador voltea a la mesa y fija su mirada en una foto entre el monton de papeles, su favorita.

Un momento de panico atenaza el corazon del Inductor. Con un rápido movimiento desenfundo su pistola de reglamento y dispara.

El estampido del trueno despertó al Librepensador. Era extraño porque no había una nube en el cielo de la playa. A su lado dormía su esposa y en el agua su hijo jugaba. Parecían tener mucho tiempo ahí. El bronceado, todo. Ella abre los ojos y le dice. “Al fin llegaste tuviste un vuelo agradable?”

El la mira y con el corazón lleno de amor, y la mente libre le dice, “no... Pero llegué, y hoy creo que me quedaré” Se acerca a ella y la besa.

El equipo de limpieza acababa de lavar los últimos rastros de los sesos del Librepensador del espaldar de la silla. Sentado tras del escritorio, el Inductor medita acerca de su fracaso.

De entre los papeles que están sobre su escritorio y que vienen del sobre ve una postal de una isla en el mar. Y por primera vez en 25 años con el proceso un pensamiento no alineado con las políticas del partido lo invadió. Deseó estar con todas sus fuerzas en esa playa en lugar de en su cuarto blanco.

Y así mientras esperaba su próximo paciente, cerro los ojos y escapo a la playa.

miércoles, febrero 09, 2005

[Mis escritos]
Llantos del payaso que ocupa una habitación en mi alma

Pienso en quienes a lo largo de mi vida pudieron completarme y que no lo hicieron por mi ceguera causada por el miedo y la apariencia, o por su ceguera causada por la apariencia y el miedo.

Pienso en los momentos que perdí regodeándome en el prístino lodo de la ira que me consumía. En las risas que corte, los Te amo que detuve, las caricias que murieron. Los amores que no dije, las lágrimas que no lloré.

Siento millones de gritos peleando en mi corazón por llegar a otro, inalcanzable, idealizado, reflejado en muchos. Nunca encontrado. Con brazos extendidos. Con chillidos de abandono.

Siento como cada fibra de mi cuerpo quiere explotar en rabia, y risa, y velocidad, y furia, y viento y agua y fuego, ante la presencia y no presencia de ella. A quien veo en muchas. Ciegas a mi corazón, O que solo ven al pobre payaso débil e invulnerable al que le rento una habitación en mi alma. Para las que simplemente soy demasiado feo.

Quiero sumergirme en las playas en las que no nade, bailar las canciones que desde la mesa vi bailar al amor que con otro se alejaba de mi.

Saltar, arriesgar, saborear, ver, hacer todo aquello que el miedo al ridículo, a la vida, a la muerte, al cambio logró convencerme de no hacer.

Quiero caminar sin la risa y la burla por compañeras. Sin la envidia trabajando concienzudamente para destruir lo poco que hago.

Quiero recuperar el tiempo invertido en destruirme y usarlo en reconstruirme. Dejar de dar pena y de causarla.

Quiero vivir, y despertar sin dolor, lleno de esperanzas. Y levantar el teléfono y llamarla y decirle te amo después de solo una campanada porque ella iba a hacer lo mismo. Y sentirme uno con ella.

Pero estoy aquí. Sentado en mi soledad. Viendo como la arena escurre entre mis dedos..

miércoles, septiembre 15, 2004

[Mis escritos]
En la playa

El juego había durado meses. Cuantos? No era interés del Inductor de la Verdad saberlo. Su trabajo era hacer que el Librepensador viera su error. Que se diera cuenta de que el tener pensamientos en contra del proceso era erróneo, pecaminoso, intolerado.

Con impecable traje oscuro y corte de cabello de acuerdo a los reglamentos, el Inductor esperaba por su “paciente” sentado de su lado de la mesa ubicada en el medio de un cuarto perfectamente blanco. Era todo parte de la rutina.

En la mesa la jarra de agua, vasos, archivos y parte del instrumental utilizado para hacer que el paciente viera la verdad. Al frente de esta mesa estaba la silla de interrogatorios. Una suerte de silla de dentista con amarras diseñada para ser realmente incomoda para su habitante.

La puerta se abre y entra un hombre flaco, golpeado. Mas que un hombre, el fantasma de uno. La boca con dientes negros. El rostro y el cuerpo desnudo surcado por diversas cicatrices en distintos estados de “frescura” e infección. Y curiosamente, sus ojos con una mirada brillante y curiosa.

Sin mediar palabras entre ellos, ambos tomaron posiciones para la obra que se llevaría a cabo ese día, como todos los días durante los últimos 3 meses.

El dolor inflingido por el Inductor de la Verdad para hacer que el Librepensador cambiara su forma de pensar. Y la terquedad de este en no hacerlo. Los gritos de dolor y espanto del librepensador, y la suave y conciliadora voz del Inductor. Todo parte de la rutina.

Y siempre la misma respuesta: “Es que no lo ves porque te dejaste enceguecer, no importa lo que hagas soy libre, no importa donde me encierres soy libre, no importa lo que yo diga soy libre. Ambos lo sabemos, por que continuas con esto? Aun si te diera la razón y dijera al mundo que Yo, el Librepensador, creo que el proceso es lo mejor, tu sabrías tan bien como yo que en mi mente yo sigo en contra. Por que es en mis ideas que se encuentra mi verdadera libertad. Si algún día lo perdiera, seria porque estoy muerto. Y aun así... ”

Y el Inductor le mostraba números, le mostraba testimonios, le mostraba el dolor y el terror. Y aun así la respuesta seguía inalterable “Tu sabes tan bien como yo que no es así”

Y lo sacaban a rastras del cuarto blanco. Algunas veces a que lo “repararan”, otras a su celda, y otras mas simplemente lo dejaban tirado en el patio.

Pero hoy había algo diferente. Luego de sentarse en la silla el Librepensador vio una expresión en el rostro del Inductor parecida a la de la comprensión de un misterio largo tiempo encontrado.

“Ahora se, mi estimado compañero, por que se aferra tanto a su posición. Orgullo... Orgullo, y la necesidad de todo padre de demostrarle a su hijo que es un hombre integro, valiente, que no le teme a sus enemigos. Pero como siempre le he dicho, compañero, todo puede cambiar. Es el estado natural de las cosas el cambio”

Con una leve sonrisa en el rostro, el Inductor toma un sobre grande de la mesa y lo vacía. De entre los diversos papeles toma un par de fotos grandes y se acerca al Librepensador.

“Esto mi amigo es la prueba irrefutable que todo cambia” Le dice mientras muestra unas fotos de su hijo con el uniforme de los Jóvenes Liberadores de la Patria. “Su hijo, su propia simiente, la razón para mantener tu actitud, es un adepto al gobierno y al proceso”

Durante unos segundos el librepensador ve la foto. Luego, con una leve sonrisa levanta su rostro y viendo al Inductor al rostro le dice “Mi hijo es libre. Y mas allá de lo que me muestras lo único que has hecho es probarlo. El siempre tuvo la libertad de ser parte del gobierno. Al contrario de ti.”

El Inductor se levanta de la banqueta y se acerca a la silla donde esta amarrado el Librepensador. “Uhm... Bueno, tal vez te interese saber que tu esposa y tu hijo murieron al poco tiempo de tomada esta foto.” Y con un rápido movimiento desenfunda una pistola automática y dispara.

El estampido del trueno lo despertó. Era extraño porque no había una nube en el cielo de la playa. A su lado dormía su esposa y en el agua su hijo jugaba. Parecían tener mucho tiempo ahí. El bronceado, todo. Ella abre los ojos y le dice. “Al fin llegaste tuviste un vuelo agradable?”

El la mira y con el corazón lleno de amor, y la mente libre le dice, “no... Pero llegué, y hoy creo que me quedaré” Se acerca a ella y la besa.

El equipo de limpieza acababa de lavar los últimos rastros de los sesos del Librepensador del espaldar de la silla. Sentado tras del escritorio, el Inductor medita acerca de su fracaso.

De entre los papeles que están sobre su escritorio y que vienen del sobre ve una postal de una isla en el mar. Y por primera vez en 25 años con el proceso un pensamiento no alineado con las políticas del partido lo invadió. Deseo estar con todas sus fuerzas en esa playa en lugar de en su cuarto blanco.

Y así mientras esperaba su próximo paciente, cerro los ojos y escapo a la playa.